Ya sea que lo hagamos cuando nos juntamos con una pareja o cuando decidimos ser adultos independientes, todos nos preguntamos en algún momento si es mejor adquirir o rentar un inmueble. Sin duda, el factor primordial será el económico. Es por ello que te traemos las respuestas de este debate: compra vs. alquiler de un domicilio.
De seguro cuando buscamos un hogar puede que escuchar el precio de un inmueble pueda asustar al inicio. Es una inversión de costo considerable, que en verdad es mucho más accesible cuando se lo paga con un tiempo.
Cuando nos mudamos de casa de nuestros papás, anhelamos encontrar un espacio en el cual podamos sentirnos cómodos. Y de seguro pensaremos en vivir mucho tiempo allí. Es por ello que la inversión de compra de un inmueble puede ser una solución, aunque parezca difícil de creer.
Al arrendar un departamento o casa, estás pagando por usar un inmueble de otra persona. Sin embargo, debes considerar que el propietario de ese inmueble sigue siendo el arrendatario. Por lo que las condiciones las pone el dueño de casa. Imagina solamente tener un cuadro valioso que te regaló la tía que tanto quieres, pero tenerlo guardado en la bodega, porque el arrendatario te pide que no coloques clavos en las paredes. En tu propia casa, tu impones las reglas.
Escuchas el precio de un inmueble y te asustas. Ten en cuenta algunas consideraciones de alquilar un domicilio. Según la Ley Reformatoria a la Codificación de la Ley de Inquilinato, los dueños de casa pueden cobrar una garantía equivalente al valor de 2 arriendos mensuales. La devolución total de la garantía al inquilino se la hará siempre y cuando el inmueble no registre daños. Así sea que desees alquilar por 1 0 2 años el inmueble, deberás contar con el valor de arriendos adicionales.
Además, la actualidad del mercado de alquiler en el país lleva a que un domicilio bien equipado cueste en promedio entre $500 y $600. Es un valor que genera ganancia a un tercero y no al que lo paga. Al pagar la mensualidad de un crédito hipotecario, estás invirtiendo en tu propio hogar, donde la ganancia está en la adquisición de un activo. Y lo positivo de adquirir una casa es que con el tiempo ganará una plusvalía, por lo que si se la vende posteriormente, se obtendrá una ganancia.
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